pom pom pom, carazón que late de pasión

Mausoleo de Fabara

Mausoleo de Fabara
Fabara mayo 2007 Sueños de arquitectura http://anatomiainfinita.blogspot.com

domingo, 22 de julio de 2007

Aplauso


Esta es una de mis fotos más queridas, la tome en los ochenta con una Yashica FX 3 que todavía conservo.
Me encanta ese instante, la expresión de su cara, la postura de las manos, el lugar, el coche que pasa por detrás.
En esa época hice un curso de fotografía y quise positivarla. Es mi primer positivo en blanco y negro (desastroso)
Desgraciadamente el negativo se quedó en la ampliadora de la Asociación Fotográfica de Catalunya; por más que lo busqué nunca apareció. Pregunté y pregunté y nada.
Al tiempo realice un curso de reportaje en la misma asociación de la cual era socio y la foto apareció totalmente retocada. El profesor que daba el curso había borrado elementos aplicando mascaras y colocó como fondo el Arc del Teatre (al final de las Ramblas de Barcelona) respetando la figura.
En la misma clase algunos alumnos insistían que la foto era retocada y él explicaba haberla hecho en una única toma. Tuve que morderme la lengua, entonces era joven y no me atreví a denunciarlo, la reconocí enseguida, la expresión de las manos y la cara seguía siendo la misma.
Ahora la tecnología, y las horas de estudio en Photoshop me la ha devuelto.
Espero que te hayas hecho muy famosa.

martes, 3 de julio de 2007

Aló!!! Hola!!! Hola???


Estoy llamando desde Pau (norte de los pirineos) a Barcelona (costa mediterránea)
¿Qué me oyen?

¡Viva la Republica!


Una amiga tiene una cuñada, ex novia de un hermano al que no conozco, algo contestataria y con la vista extraviada.
En la familia han decidido llamarle ”Acida” ya que nunca esta de acuerdo con nada.
Por ejemplo: se sientan todos en una terraza, cada uno decide lo que toman.
El padre, la madre, la hermana, el hermano, el cuñado, el tío, el ahijado, la prima, la sobrina, el nieto, el abuelo paterno, la abuela materna, la suegra, un ex novio, el consuegro, el hijo, un amigo, mi amiga y María.
Piden cada uno lo suyo, una cerveza, limonada, café, agua, un chiquito, cola, te helado, granizado, mantecado, una horchata, carajillo, descafeinado, vino, tónica, soda, vermú, un chinchón con hielo, naranjada… y entonces llega la pregunta: ¿y tú María qué tomas?
¡Uf, no sé! – Contesta con la mirada ausente perdida nadie sabe donde y seria, muy seria.
Otra vez sentados todos a la sombra, en la puerta de la casa, donde al sol se esta a treinta y ocho grados, en el resquicio a diez menos, distraen el rato hablando de política, toros, fútbol, el tiempo, los hijos, vecindario, rebajas, el último coche, prensa rosa, caquitas de niño, lo mono que esta el perro con su coletita (y que crecido), mira que móvil me he comprado, el tono de piel, puntos (del carnet), la última gamberrada que preparo, lo fibrado que tengo el cuerpo, ¿y sí me opero?, la batalla del…
María esta de espalda a ellos mirando la persiana de delante, la tiene enfrente, apoyada los codos sobre las piernas y la cara en las manos cerradas como puños.
Acida igual a María inmersa en sus pensamientos lejos del mundo familiar, quizá por eso es ex.
Sería bueno adentrarse en el pensamiento crítico y no creer en todo lo que te cuentan, tener una realidad objetiva, demostrada y vivida, aunque al final si como el santo tocamos las llagas, tengamos que admitirlo... lo mejor: ¡¡¡La República!!!